Ya se acaba. Me vuelvo a casa. Alguien dijo alguna vez eso de "DE MADRID AL CIELO", espero redescubrir la ciudad, encontrar mi hueco entre tanta gente y crecer.
Este mal rato me ha servido para estrechar lazos, para creerme que están ahí, para ver que poderoso es el miedo y lo mucho que se sufre por amor.
El sábado fuimos de concierto, a embriagarnos con Gilberto Gil y sin quererlo me susurró el "Three little birds", decidí hacerle caso y pensar que todo irá bien. Menos mal que tengo unas personitas que me escuchan y aguantan mi tabarra y mis dudas.
1 comentario:
Que bueno lo del concierto, ya imagino la suavidad de todo... acariciando con la voz..
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