Un salto, un cambio, un empezar de cero, redescurbirme, volver a dormir sola, volver a vivir sola, sola, sola, sola, sola...y la verdad? Es lo que tenía que pasar. Me gusta estar sola, me gusta volver a dormir sola, me gusta donde estoy, me gusta quien soy, me gusta que me guste quien no quiere gustarme, me gusta mi barrio, me gusta mi gente, me gusta tratar de saber qué quiero. Hay veces que te aferras a algo por miedo a estar solo, por miedo a tomar de verdad las riendas de la vida, por miedo a romper con la rutina. Qué hijo de puta es el miedo!!! Te paraliza, te bloquea...hasta que llega un chute de adrenalina y mandas a tomar por culo el miedo y arriesgas.
Ahora me acerca a los 30, en unos meses. Los 30 son un 10, que es un número de conclusión. De estos años una parte muuuuuuy larga la he compartido contigo y por eso...GRACIAS!!!! Por todo lo que hemos aprendido juntos, por todas las risas, las lágrimas, los abrazos. Fue un placer compartir parte de mi viaje a tu vera. SÉ FELIZ!!! Aunque no tuviésemos mucho en común. La vida al final nos ha colocado donde teníamos que estar.
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